
¡Imagina que puedes alcanzar tus metas con solo cerrar los ojos! Bueno, no es exactamente así, pero casi. Las técnicas de visualización para potenciar el crecimiento personal son como el yoga para la mente, pero sin tener que hacer ninguna postura complicada. Es como tener un superpoder mental que te permite ensayar tu éxito antes de que suceda, ¡y todo desde la comodidad de tu sofá!
La visualización creativa, por ejemplo, es como ser el director de tu propia película mental, donde tú eres el protagonista que siempre consigue lo que quiere. Imagina que estás aceptando un premio, cruzando la línea de meta o incluso, encontrando un lugar para estacionar en la ciudad en hora pico. Lo importante es que sientas la emoción y la experiencia como si fuera real, ¡y todo esto sin tener que pagar entrada para el cine!
Y no te preocupes si al principio te sientes un poco tonto. No es más raro que hablarle a tus plantas o ponerle nombre a tu coche. La práctica hace al maestro, y con la visualización, cuanto más lo haces, más natural se vuelve. Pronto, estarás visualizando cómo te conviertes en un experto en visualización. ¡Qué meta!
Además, puedes complementar tu práctica con un tablero de visión. Es como un Pinterest personal, pero en lugar de pines, usas recortes de revistas que representan tus sueños y objetivos. Cada vez que lo mires, tu cerebro recibirá un recordatorio visual de «esto es lo que quiero», y eventualmente, tu mente subconsciente se pondrá las pilas para ayudarte a conseguirlo.
Así que, ¿por qué no darle una oportunidad a la visualización? Puede que no te transporte mágicamente a tu destino deseado, pero definitivamente te pondrá en el camino correcto. Y lo mejor de todo, ¡es gratis y no tiene efectos secundarios! (A menos que consideres alcanzar tus sueños un efecto secundario, claro está).