Muchas veces hemos escuchado lo gratificante que es dar, incluso se nos enseña a compartir y donar parte de nuestro tiempo a una causa (equivale a dar), pero pocas veces nos enseñan que de la misma manera que damos, también debemos recibir; cuando no recibimos de manera proporcional a lo que entregamos, se genera un desequilibrio que conlleva al cansancio físico y emocional.
Cabe de anotar que cuando hablo de recibir, no solamente es a nivel monetario, también es recibir un abrazo, un alago, una nota, ayuda, amor, entre otros.
La mejor manera de darnos cuenta si sabemos recibir es contestando estas preguntas, si más de dos salen afirmativas, debemos trabajar para aprender a Recibir.
- ¿Cuándo te dan un regalo sin ser una fecha especial, sientes la necesidad de retribuir con algo?, o te preguntas ¿Por qué te están dando el regalo?, o ¿Te sientes incomodo(a)?
- ¿Cuándo alguien te invita a comer te sientes incomodo(a) si no ayudas a pagar la cuenta?, o ¿Cuándo traen la carta lo primero que miras son los precios?
- Si estas capacitado para realizar una actividad en especial (consultoría, decoración, repostería, artes, sistemas entre otros), ¿Te sientes incomodo(a) cobrando?
Ejercicios para este día:
- Este día seguiremos la rutina sugerida en los días anteriores (agradecer al levantarnos, un vaso de agua en ayunas, buena alimentación, tomar un litro de agua durante el día, ejercicio y evaluación de conciencia antes de dormir).
- Merecimiento: (descargar ejercicio: Actividad Merecimiento).
Recuerda pedirle a tu Ángel de la Guarda que te ayuda en todo este proceso.
